Proyecto 18-05
Hoy nuevamente fui a recoger otro bonche de rollos que mandé a revelar. Esperaba recibir cuatro rollos en buen estado en donde se veía reflejado el tiempo y esfuerzo que puse en tomar esas fotografías. Sin embargo lo que recibi fueron 144 fotografías (o fotogramas) en blanco, y otros en negro. Me desespere bastante, puesto que había gastado mas de 180 fotografias(junto con otro rollo que había salido igual) y $300 pesos en comprar rollos y mandarlos a revelar para que todo se fuera a la basura.
O al menos eso fue lo que pensé. Después de ese pequeño incidente fui con un conocido que trabaja por la calle de República de Brasil. Se llama Héctor, él era fotógrafo pero decidió retirarse y poner un pequeño local en donde vende sus camaras y sus servicios de fotógrafo. Hasta el momento ha sido el que me ha ayudado a entender todo esto de la fotografía análoga, y supuse que sería una persona que me podría ayudar con mi problema.
Al llegar al lugar terminé de comprobar que todos los rollos estaban en blanco. Lo malo es que ya tenía otro rollo que estaba usando. Sabía que no era un problema del proceso de revelado, porque habría salido en unos cuantos, no todos. Entonces se abrió la cámara y el problema estaba en la cortina de obturación. Porque al oprimir el disparador esta no se movía, y por ende la imagen no se registraba en la película.
Terminé dejando la camara con Don Héctor para que la reparara, pero eso significaría en un gran retroseso en mi proyecto. Me sentí muy frustrada y enojada, mas que nada por todo el gasto (tanto económico como de tiempo) que invertí en esos rollos. Además de que es una cámara que me prestaron. Pero por suerte el señor me prestó una de sus cámaras para que la usara en lo que arreglaba la mía y así no tuviera que pausar mi proyecto.
Después de caminar un rato por las calles del centro histórico y meditar bien la situación. Pensé que no necesariamente todo era una perdida. Ya que al fin y al cabo mi proyecto es mas como una exploración y deriva con la cámara análoga, viendo hacia a donde me lleva todas estas situaciones. averiguando todas las posibilidades que me tra este tipo de fotografía, y en eso esta este tipo de siuaciones. No todas las fotografías estan aseguradas como en la cámara digital, que estan en alguna parte de una memoria SD. La fotografía análoga es algo más fisico y palpable, lo cual por ende tiende a ser más vulnerable a la interacción con el entorno. Y en lo único que se puede recaer para "preservar" de cierta forma todas esas imagenes que pretendí tomar con esa cámara, es mi memoria.
Porque recuerdo en algunos rollos a qué le tome fotos, o de que trataba lo que hacía. Lo cual lo puedo transportar a otros medios, como bitácoras, historias, ilustraciones, etc.
Por lo que ahora tengo 180 memorias (imágenes) invisibles, que solo podré recordar por otros medios y tener como prueba esos rollos en blanco.
O al menos eso fue lo que pensé. Después de ese pequeño incidente fui con un conocido que trabaja por la calle de República de Brasil. Se llama Héctor, él era fotógrafo pero decidió retirarse y poner un pequeño local en donde vende sus camaras y sus servicios de fotógrafo. Hasta el momento ha sido el que me ha ayudado a entender todo esto de la fotografía análoga, y supuse que sería una persona que me podría ayudar con mi problema.
Al llegar al lugar terminé de comprobar que todos los rollos estaban en blanco. Lo malo es que ya tenía otro rollo que estaba usando. Sabía que no era un problema del proceso de revelado, porque habría salido en unos cuantos, no todos. Entonces se abrió la cámara y el problema estaba en la cortina de obturación. Porque al oprimir el disparador esta no se movía, y por ende la imagen no se registraba en la película.
Terminé dejando la camara con Don Héctor para que la reparara, pero eso significaría en un gran retroseso en mi proyecto. Me sentí muy frustrada y enojada, mas que nada por todo el gasto (tanto económico como de tiempo) que invertí en esos rollos. Además de que es una cámara que me prestaron. Pero por suerte el señor me prestó una de sus cámaras para que la usara en lo que arreglaba la mía y así no tuviera que pausar mi proyecto.
Después de caminar un rato por las calles del centro histórico y meditar bien la situación. Pensé que no necesariamente todo era una perdida. Ya que al fin y al cabo mi proyecto es mas como una exploración y deriva con la cámara análoga, viendo hacia a donde me lleva todas estas situaciones. averiguando todas las posibilidades que me tra este tipo de fotografía, y en eso esta este tipo de siuaciones. No todas las fotografías estan aseguradas como en la cámara digital, que estan en alguna parte de una memoria SD. La fotografía análoga es algo más fisico y palpable, lo cual por ende tiende a ser más vulnerable a la interacción con el entorno. Y en lo único que se puede recaer para "preservar" de cierta forma todas esas imagenes que pretendí tomar con esa cámara, es mi memoria.
Porque recuerdo en algunos rollos a qué le tome fotos, o de que trataba lo que hacía. Lo cual lo puedo transportar a otros medios, como bitácoras, historias, ilustraciones, etc.
Por lo que ahora tengo 180 memorias (imágenes) invisibles, que solo podré recordar por otros medios y tener como prueba esos rollos en blanco.
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